Tomado de El Diario de Nueva York
Captura del vídeo de la cámara de seguridad del edificio. |
Un Policía de Nueva York (NYPD) mató un pit bull en un edificio de apartamentos de El Bronx momentos después de que la dueña del perro intentara convencer al oficial de que el animal era inofensivo, lo que dejó a la mujer en un profundo duelo, según dijo al Daily News este jueves.
Yvonne Rosado, de 42 años, dijo entre lágrimas que su mascota de 4 años no representaba una amenaza. “Mi perro de 70 libras (unos 32 kg) estaba de pie sobre sus patas traseras, bailando conmigo justo antes del disparo. Cuando la Policía del precinto 46 llegó, alrededor de las 5:30 a.m., mi perro comenzó a ladrar y yo abrí la puerta para saber qué pasaba. Spike salió al pasillo donde el policía estaba”, manifestó Rosado.
Un vídeo capturado, el 13 de febrero, por una cámara de seguridad muestra al oficial en el edificio mientras respondía a un supuesto caso de violencia doméstica en un apartamento vecino. En el clip, se ve al oficial disparar contra Spike a alrededor de 3 pies (menos de un metro) de distancia. El policía disparó casi inmediatamente, mientras bajaba las escaleras. La vecina Irma Sue Santiago, de 46 años, dijo al citado rotativo que el agente no estaba en situación de riesgo durante el enfrentamiento.
Según Rosado, el NYPD no ha explicado lo que pasó ni se ha disculpado por el tiroteo. Una fuente del Daily News identificó el policía que disparó como Rubén Cuesta, que se unió a la Fuerza en 2008.
La agencia emitió un escueto comunicado sobre el incidente. “El incidente está siendo investigado por nuestra División de Investigación y las conclusiones estarán sujetas a una junta de revisión de descarga de armas de fuego“.
El abogado de Rosado, David Thompson, presentó una demanda contra la ciudad. El letrado cuestionó antes los medios si la NYPD no aprendió nada de Peter Liang, refiriéndose al policía condenado por disparar a un hombre desarmado en una escalera a oscuras en Brooklyn.
De acuerdo con la política de NYPD, un Policía puede dispararle a un animal sólo para defenderse a sí mismos y/o a otros de amenaza de daño físico o muerte. Sólo se les permite usar sus armas “como último recurso para detener un ataque de un animal”.
En 2014, la última vez que la Policía de Nueva York presentó su informe de revisión de descargas de armas de fuego, oficiales habían disparado a 18 animales, la mayoría de ellos perros. Es uno menos que en 2013. En 2011, 36 animales fueron baleados por la policía durante ataques.
Vídeo del canal de YouTube de Stecklow & Thompson.
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