Los jabalíes llegan al parque Güell.

Los jabalíes han llegado este verano hasta el parque Güell de Barcelona, han explicado a Europa Press vecinos del lugar, que desde finales de agosto han visto a una pareja con seis crías por las calles que rodean la zona boscosa del parque.

Enviado por Ecoticias

Su presencia se ha seguido notando esta semana, y ha provocado más de un susto. "Una vez el autobús tuvo que pegar un frenazo para no chocarse con ellos", han relatado residentes de la calle Torrent del Remei.

Los vecinos se han puesto en contacto con la Guardia Urbana, que les ha comunicado que ya tienen constancia de la llegada de los jabalíes y que están a la espera de que se encarguen de los animales desde el Parque de Collserola, zona de la que proceden.

A la Conselleria de Medio Ambiente y Vivienda han llegado diversos avisos por el avistamiento de jabalíes en el parque Güell y zonas próximas a la sierra de Collserola. Los Agentes Rurales han realizado algunas actuaciones para capturarlos.

Les consta un aviso desde el parque Güell del 11 de agosto, y tienen otro del 25 de agosto sobre la irrupción de estos mamíferos en zona urbana del Barcelonès. En el parque de la Guineueta de Barcelona también fueron vistos el 22 de julio.

Fuentes de Medio Ambiente han explicado a Europa Press que la Conselleria quiere negociar con el Consorcio de Collserola y los ayuntamientos del área para consensuar medidas para afrontar el problema.

NO CONVIENE ALIMENTARLOS

El Ayuntamiento de Barcelona empezó en julio una campaña informativa para recordar a los vecinos de las zonas próximas a Collserola que no den comida a los jabalíes ni dejen bolsas de basura fuera de los contenedores.

Pese a ser animales salvajes, se acercan a las zonas urbanas cuando allí encuentran comida más fácilmente que en el bosque. Este comportamiento aumenta el riesgo de accidentes en las vías de circulación y destrozos en los espacios verdes.

Según subraya el Área de Medio Ambiente del consistorio en su página web, si se domestican estos animales son irrecuperables para la vida salvaje, y deben ser capturados y después encerrados o sacrificados.