-Vía web se puede consultar su posición en un mapa
-De momento sólo tiene cobertura en Estados Unidos
Artículo de Álvaro Ibáñez "Alvy", tomado de Rtve.es
Los últimos avances tecnológicos también llegan de vez en cuando al mundo de las mascotas: muchos animales domésticos ya van equipados con chips identificadores, pero ahora se les pueden poner más chips todavía.
Una empresa ha inventado una forma fácil de localizarlos 'al momento' en caso de que se pierdan o escapen gracias a un invento que combina un collar especial con un sistema localización mediante satélite (GPS) e Internet.
El nuevo gadget se llama Tagg, the Pet Tracker y es similar a otros que ya existían para seguimiento de vehículos e incluso de niños. Básicamente consiste en un collar para perros (o gatos) que incluye un receptor de GPS y un emisor de señales inalámbricas.
El receptor capta las coordenadas exactas en las que está el animal. Al mismo tiempo puede emitir esa señal periódicamente haciéndosela llegar al dueño del animal a través de un mensaje de correo, vía web o con un SMS.
¿Cómo funciona?
El Tagg Pet Tracker se compone de dos partes: el aparato que llevan encima las mascotas y un servicio vía web con el que se gestiona el cómo funciona.
En dicho servicio hay que registrar al animal y marcar sobre un mapa su 'zona de movimientos habitual' (por ejemplo, la casa, el jardín o una zona del barrio o urbanización).
El sistema solo se activa enviando mensajes cuando sale del 'territorio marcado', con un margen de error de unos pocos metros. De este modo se evita estar recibiendo continuamente avisos.
También se puede consultar dónde está el animal en cada momento: es una forma rápida de localizarlo en caso de que se haya perdido o se haya ido de aventuras por el vecindario o el parque. La web está diseñada de modo que puede consultarse también desde un teléfono móvil con navegador.
Las baterías del Tagg tienen una duración de 30 días, de modo que puede pasar bastante tiempo sin que haga falta quitarle el collar al animal para recargarlas en la base principal.
El aparato es pequeño y está diseñado de modo que no resulte molesto para las mascotas; incluye un botón de 'modo paseo' que desactiva temporalmente las alertas para sacarlo tranquilamente a dar una vuelta por el barrio sin recibir avisos ni tener que anular antes la programación en la web.
La idea de Tagg, que se ha lanzado este verano, suena muy bien, pero debido a la tecnología que emplea de momento solo funciona con la red de telefonía inalámbrica de Verizon en Estados Unidos y sus zonas de cobertura móvil.
El coste del aparato principal (base, cargador, etcétera) es de unos 200 dólares (unos 150 euros) e incluye un collar y un año de servicio.
Además de otros complementos (collares extra, cargadores, correas, etcétera) hay que tener en cuenta que la renovación del servicio tiene un precio de unos 60 dólares anuales (40 euros), así que tener a la mascota 'controlada' puede salir un poco caro.
Aunque, como bien saben quienes tienen un animal de compañía, nada puede pagar la alegría de recuperarla cuando se ha perdido.
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