Fotos: FM 101.7 Radio 3 Virrey del Pino.
Colaboración de Maria Rosa Golia, tomada de 24Con
El sábado a la tarde, la plaza de la rotonda de Oro Verde, en Virrey del Pino fue el escenario para un suceso atroz, y los chicos y vecinos que jugaban allí, los testigos. Un carro realizaba una mudanza a los mandos de “Juancito”, pero la yegua que tiraba la carga no quiso hacer más fuerza.
El animal, de pequeño porte y casi completamente negro, no podía seguir esforzándose, estaba preñada. Ante los azotes del carrero, el equino apenas se movió. Su silencio fue el preámbulo para el horror.
Ante los vecinos que estaban en la plaza, Juancito la golpeó hasta matarla. No se sabe si el dueño sabía que el animal estaba preñado o no supo entender los síntomas. De una manera u otra, el desenlace fue inhumano.
Según informó Radio 3 de Virrey del Pino, Juancito es conocido en el barrio por utilizar su carro para sacar basura domiciliaria. Los vecinos le pagan por llevarse los residuos que luego arroja en otra zona y a la intemperie. Además, tiene mala fama con los animales. Antes de la yegua oscura que murió bajo su mano, supo trabajar con otra petisa zaina (colorado oscuro), a la que habría quebrado jugando carreras y obligado a seguir trabajando a pesar del daño en su pata. El final también fue triste, murió cuando se le engangrenó la pata quebrada. Se cree que los animales son adquiridos ilegalmente.
El cuerpo de la yegua oscura, ya sin vida, quedó abandonado a la vera de la calle, en la intersección de Coronel Hortiguera y Méndez, a la altura del kilómetro 36 de la Ruta 3. Allí sus mamas derramaron la leche que preparaban para su cría, y varias horas después de la muerte, dio a luz a un potrillo muerto, confirmando su estado. Los vecinos aún no salen del estupor por el triste desenlace de la vida del animal y su cría.
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