La Policía Local encuentra tres perros muertos y otros cuatro en estado de abandono

Agentes de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife intervinieron el pasado sábado en una finca ubicada en los alrededores de San Andrés donde los policías localizaron unas instalaciones abandonadas, con caniles incluidos, en los que había tres cadáveres de perros y otros cuatro animales en muy mal estado.

Tomado de Diario de Avisos.com

Albergue Valle Colino. / DA

Santa Cruz de Tenerife, julio 22, 2013.
En las casetas de madera también encontraron indicios de apuestas sobre peleas ilegales de perros, así como material y medicamentos para curar posibles heridas de los canes.

Este servicio se inició sobre las 16.00 horas ante el aviso de una vecina cuyo perro había sido mordido por uno de los animales que estaban sueltos, junto a las instalaciones localizadas en la denominada ladera de Cúter, en San Andrés. Una vez en el lugar, los policías localizaron al perro y lo mantuvieron en las inmediaciones hasta que el personal de la perrera comarcal de Valle Colino logró capturarlo. El animal posee características propias de un cruce entre las razas Stanford y Pitbull, por lo que estaría catalogado como un perro potencialmente peligroso. Tras distintas averiguaciones se pudo determinar, según varios testimonios, quien era el propietario del mismo aunque cuando esa persona fue localizada negó ser el dueño del animal.

En la inspección de las instalaciones se encontraron varios animales muertos y otros desnutridos e incluso alguno con una pata rota y diversas heridas. De todo ello se hizo cargo el personal de Valle Colino. Una de las curiosidades de este hallazgo es que en el lugar de los hechos había varias cestas con nombres de perros y que marcaban que la apuesta mínima era de 2 euros, además existía una relación con nombres y apodos de los apostantes. Todo ello hace indicar que en ese lugar se podrían haber desarrollado peleas de perros.

Además, los agentes también se percataron en las proximidades de la presencia de varias cabras que estaban encerradas junto al cadáver de una de ellas. En este caso, si se localizó al propietario de los animales y se dio cuenta de todo ello a las autoridad competente.